Las Murallas de Barcelona: Historia y Evolución de una Ciudad Amurallada
Las murallas de Barcelona, una serie de fortificaciones construidas a lo largo de los siglos, representan una parte esencial del pasado de la ciudad y reflejan su evolución desde un asentamiento romano hasta una metrópolis moderna. Aunque hoy en día solo quedan algunos restos visibles, estas murallas fueron en su tiempo estructuras imponentes que definieron y protegieron el crecimiento de Barcelona. En esta entrada, exploraremos los diferentes periodos de construcción de las murallas y el impacto que tuvieron en el desarrollo urbano. En nuestro Free Tour Barcelona comenzamos explicando y mostrando parte de esta muralla.
Las Primeras Murallas: La Época Romana
La primera fortificación de Barcelona se remonta a la época romana, cuando la ciudad era conocida como Barcino. Construida entre los siglos I y III d.C., la muralla romana rodeaba un pequeño núcleo urbano de aproximadamente 10 hectáreas. Este perímetro seguía el trazado actual del Barrio Gótico, y algunos restos de esta muralla aún pueden verse en lugares como la Plaça Nova y en las calles cercanas a la Catedral. La muralla romana no solo protegía a los ciudadanos de posibles invasores, sino que también marcaba los límites de la ciudad.
La Expansión Medieval
Con el paso del tiempo, Barcelona creció más allá de las murallas romanas y, durante la Edad Media, la ciudad construyó nuevas fortificaciones para proteger a su creciente población y sus prósperas actividades comerciales. En el siglo XIII, bajo el reinado de Jaime I, se decidió ampliar el perímetro amurallado para incluir el área del Raval y las zonas cercanas al puerto. Las murallas medievales permitieron a Barcelona prosperar como uno de los puertos más importantes del Mediterráneo.
Además, estas murallas medievales contaban con grandes puertas que regulaban el comercio y las actividades económicas. Hoy en día, algunos vestigios de estas estructuras pueden observarse en los alrededores de la Avinguda de la Catedral y en los restos del Portal de Mar.
Échale un vistazo al post de la Barcelona Gótica.
El Crecimiento y la Caída de las Murallas en la Edad Moderna
Durante la Edad Moderna, Barcelona experimentó un crecimiento poblacional y económico que llevó a una nueva ampliación de las murallas. Sin embargo, estas murallas empezaron a convertirse en un obstáculo para el desarrollo urbano. A mediados del siglo XIX, el crecimiento de la ciudad estaba limitado por el espacio dentro de los muros, lo que provocó condiciones de hacinamiento.
Fue en este contexto que se decidió derribar las murallas para permitir la expansión de la ciudad. Este derribo permitió la construcción del Eixample, el innovador proyecto de planificación urbana diseñado por Ildefons Cerdà que transformó Barcelona en la ciudad moderna que conocemos hoy. Este cambio no solo liberó a la ciudad de sus límites físicos, sino que también representó una transformación en su identidad.
Las Murallas Hoy: Vestigios y Patrimonio
Aunque la mayoría de las murallas de Barcelona ya no existen, algunos tramos han sido preservados y pueden visitarse, integrados en la vida urbana actual. Uno de los lugares más emblemáticos para observar estos restos es la Plaça Ramon Berenguer, donde las antiguas murallas romanas y medievales se unen para contar la historia de una Barcelona en constante cambio. También en el Museu d’Història de Barcelona (MUHBA), los visitantes pueden explorar tramos subterráneos de la muralla romana y descubrir objetos históricos.
Free Tour Barcelona
Alejandro Andrino